En primer lugar los productores locales no conocen a detalle los requisitos, aunque basicos no los cumplen, o no saben como su producto puede competir con otro del mismo municipio o de otra región del departamento. El incumplimiento de pagos o continuos retrasos y la confiscación para impuestos hace creer que el pequeño productor no alcance altas ganancias. Los contratos pasan a manos de medianos y grandes proveedores que compiten para ofertar el mejor precio, no asi la mejor calidad. Las instituciones publicas no hacen públicos los contratos ni los montos asignados a los mismos solo autoridades conocen y pueden fiscalizar los productos de ACE, y no cumple un rol nutricional adecuado, es decir la ACE tiene que “suplir” la deficiencia nutricional y por lo tanto requiere de productos con costos altos, lo que no es tomado en cuenta.
La burocracia y e incumplimiento por parte del nivel público en general genera poca confianza a los proveedores, que al verse en una situación desfavorable no sabe donde recurrir o que medidas legales asumir.