Considero que la aplicación de los criterios de Contrataciones abiertas en un proceso de contratación pública en Bolivia es viable pero requiere de trabajo multidisciplinario y eficiencia. Ello requiere, también, de la de voluntad política e institucional, garantizando así a las entidades públicas poner a disposición de sus proveedores, contratistas y sociedad civil toda la información y entregar a simple requerimiento verbal, su programa anual de contrataciones y contrataciones menores, incluso aquellas que son menores a los 20 mil bolivianos.
Yo identifico una dificultad técnica que es la falta de estandarización de esta plataforma de contrataciones, lo que hace muy difícil la búsqueda y obtención de información, como los nombres con los que son subidos por parte de los funcionarios públicos y la dificultad para cruzar los datos, sus formatos son realmente poco flexibles al análisis y nada enfocados en fortalecer la participación ciudadana. Por otra parte, menciono la dificultad institucional, por ejemplo la enorme discrecionalidad calificación de las propuestas lo que provoca desconfianza sobre si realmente las mejores propuestas son las adjudicadas. Creo que mejorar políticas públicas, refrescar el aparato público y su burocracia y la promoción de la participación ciudadana serían opciones.